Libertad y Cobardia

Despierto una vez mas, toda la noche en vela el andar de mis pensamientos comienza a aclararse; un sin fin de veces con maleta y cautela mi alma trato de escaparse... Ya no te amo una frase simple y cortante ni la costumbre despeja el sentimiento a tu lado metamorfosis de farsante. Mejor que se acabe asi, tu lecho de monarca te arrulla flotando en la nube de un loco frenesi; ¿que oigo?... mi amigo desde afuera aulla sabiendo que me alejo de ti. Sigilosa mi salida en la sombra como ese primer dia que menti a mi madre, ya no quiero vivir en zozobra me voy con mi perro, ojala no ladre... De frente al sol del nuevo dia libre al fin, nunca mas cautivo; manipulaciones y soberbia sin motivo bendita huida, libertad en cobardia.

INVIERNO, KALUMA Y YO

Invierno en Connecticut... nevando una vez más, al abrir la puerta se siente la ráfaga de frío en mis ojos, solamente mi fiel perra se atreve a acompañarme aferrándose a mi sombra escapando de una intemperie percibida. Al limpiar las ventanas del carro el viento sopla nieve en mi cara y la convierte en gotas de agua que ruedan por las mejillas. Siento humedad entre mis manos, la nieve en mis guantes se cuela hecha agua...mientras ella corre olfateando la nieve acumulada tratando de percibir su esencia...ahh, corrió bastante lejos para hacer sus necesidades, voy a buscarla, la hallo y me abraza moviendo la cola. Me quedo observando el camino recorrido, huellas de patas y zapatos en una misma dirección. Kaluma y yo regresamos al calor de la casa. Lo bueno del invierno es que el tímido sol derretirá nuestros pasos y ni huella quedará de aquel encuentro, cosas del destino y el tiempo. Me voy a trabajar.